My work focuses on representing the labor activities of the people of Oaxaca, highlighting aspects of daily life that often go unnoticed in the fast-paced rhythm of modernity. Through painting and drawing, I seek to explore the tensions between the traditional and the contemporary, creating a visual space that invites reflection on the social, political, and cultural dynamics of the Oaxacan context. For example, in El Plantón (2019), I document a social protest in an urban setting, using visual representation as a means to address themes of resistance and social change. My artistic practice is rooted in a realistic technical approach that emphasizes a unique visual language, while I research and reflect on the social structures that shape everyday life. As John Berger noted, "Seeing comes before words. The child looks and recognizes before it can speak." This idea resonates deeply in my work, as I believe that observing the everyday is essential for understanding social issues and conflicts. Through my pieces, I aim to represent social themes that are underexplored in the Oaxacan pictorial context, offering new perspectives on the region's visual narratives. The work of artists like Saturnino Herrán and Édouard Manet has significantly influenced my understanding of art as a tool for social reflection. Their ability to capture social events with a visual poetry has been a key point of reference in my creative approach. In this sense, I aspire for my work to serve as a vehicle for social analysis, addressing issues of identity and justice through a distinctive visual expression deeply connected to the environment I depict. Declaración de Artista Mi trabajo se enfoca en la representación de las actividades laborales de los habitantes de Oaxaca, destacando aspectos de la vida cotidiana que a menudo pasan desapercibidos en el ritmo acelerado de la modernidad. A través de la pintura y el dibujo, busco explorar las tensiones entre lo tradicional y lo contemporáneo, creando un espacio visual que invita a reflexionar sobre las dinámicas sociales, políticas y culturales del contexto oaxaqueño. Por ejemplo, en El Plantón (2019), documento una protesta social en un entorno urbano, utilizando la representación visual como medio para abordar temas de resistencia y cambio social. Mi práctica artística se nutre de un enfoque técnico realista que enfatiza un lenguaje visual propio, mientras investigo y reflexiono sobre las estructuras sociales que configuran la vida cotidiana. Como señaló John Berger, "Ver viene antes que las palabras. El niño mira y reconoce antes de hablar". Esta idea resuena profundamente en mi trabajo, ya que considero que observar lo cotidiano es fundamental para comprender las problemáticas y conflictos sociales. A través de mis piezas, busco representar temas sociales poco explorados en el contexto pictórico oaxaqueño, aportando nuevas perspectivas a las narrativas visuales de la región. La obra de artistas como Saturnino Herrán y Édouard Manet ha influido significativamente en mi comprensión del arte como herramienta para la reflexión social. Su habilidad para capturar eventos sociales con una poética visual ha sido un punto de referencia clave en mi enfoque creativo. En este sentido, aspiro a que mi trabajo funcione como un vehículo para el análisis social, abordando temas de identidad y justicia mediante una expresión visual distintiva y profundamente conectada con el entorno que retrato.